SINOPSIS

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PINGÜINOS EN PARÍS (BAJO DOS TRICOLORES)

                                        SINOPSIS

Pingüinos en París – Bajo dos tricolores –, es una novela que trata de un tiempo y de unos personajes. El tiempo de la obra transcurre durante la primera mitad del pasado siglo. Alguno de sus personajes son rigurosamente históricos; otros aparentemente ficticios y todos, apasionadamente reales. Tratados con respeto pero sin indulgencias, analizados por lo que permite la fantasía o cuenta la historia y descritos con el perfil de la pasión literaria.

La novela se inicia con la aparición de cada uno de los actores que formaran parte del contexto de los personajes principales y de sus vivencias. Amigos, enemigos; propios y extraños, desfilaran a través de las páginas para dar sentido a una historia de amor y a una conquista. La historia de amor principal es la que viven Nicoletta y Hugo. Partiendo de dos entornos diferentes y alejados en la geografía, pero no en la distancia, los avatares de la obra les hacen converger, a pesar de los conflictos, en eso que llamamos amor eterno y que pocas veces llega a buen puerto.

No es la única historia de amor y desamor de la obra, sería imposible escribir una buena novela sin abundancia de sentimientos y así, a lo largo del texto, conoceremos a los tres verdaderos amores de Madame Sitrì y a media docena de los pasajeros, no en balde regenta el más famosos prostíbulo de Livorno. El sentimiento  pecaminoso de Pietro por su madrasta; las dudas de Fiorella ante un destino con Vincenzo, cuando ella cree llevar  un alma masculina desde su nacimiento en las montañas de Catania o su ambigua relación con Elisabeth, una más de las abundantes heroínas de esta novela. Tampoco defraudará la pasión mutua de Gerda Taro y Robert Capa y su fatal desenlace; la fogosidad de Alfonso XIII,  o el imposible destino de David con…

Pero no solo con sentimientos de amor se llenan las páginas del libro. Traiciones, amarguras y ausencias nos conducirán a través de una guerra entre hermanos a conocer y coincidir con otros nuevos personajes como Martín Bernal, Luisa Rainer, Giorgio Caproni, Ignacio Bowen, Raymond Dronne, Joan Pujol, Philippe Leclerc y tantos otros, en los hermosos paisajes de la Toscana o en ciudades como Barcelona, Madrid, Roma, París o Londres y por campos de batalla como Teruel, Brunete o Écouché. Iremos descubriendo, con asombro, que todos ellos son tan reales como la Historia. Espías, actrices, poetas, novilleros, militares o sencillamente: luchadores por la Libertad.

Los caminos de esa lucha por la liberación propia y global les conducirán a las  separaciones forzadas, al éxodo, al destierro; incluso a la muerte. Sin embargo, la distancia no será obstáculo para que Nicoletta atrapada en una Barcelona en manos de los sublevados y Hugo, prisionero en una playa francesa y más tarde huido de la Francia ocupada por los nazis, se reencuentren de nuevo en la Ciudad Condal en labores de espionaje, y puedan huir juntos a un Londres amenazado por los bombardeos alemanes. Y nada detendrá a Robert Capa para que inmortalice otra guerra, como la que él y Gerda enaltecieron en tierras españolas. El reportero se lanzará sobre Sicilia y allí coincidirá con muchos de los personajes de la novela; también en la isla, Fiorella encontrará, sin proponérselo, su camino a Hollywood. Y muchos, la muerte o la pérdida.

Mientras tanto, amigos de Hugo y nuevos personajes formaran en África una de las compañías que más gloria ha dado a los republicanos españoles: La Nueve. Todos irán coincidiendo en ese grupo con siglas y nombre español, compuesto en su mayoría por republicanos españoles, bajo el mando del capitán Dronne. Hugo y Pietro se le unirán, después de que el primero sepa que va a ser padre y el segundo viva una gran y antigua pasión en tierras inglesas. Ciento cuarenta y cuatro españoles que junto a sus half track de inequívocos nombres como: Teruel, Guadalajara, Madrid, Guernica, Ebro, Brunete, Santander, Don Quijote, España Cañí, Belchite, Cap Serrat, Túnez o Belchite, desembarcaran en Normandía y atravesaran la Francia ocupada librando batallas hasta llegar a las puertas de París. Llevan pintadas en sus carrocerías dos banderas: la de la Francia libre y la Republicana española y en su corazón el deseo del imposible regreso.

Son “los Pingüinos”, el nombre por el que se conocen a los españoles de la División Leclerc en el resto de las unidades aliadas, o los feroces “cosacos”, como les llamó su propio capitán. Ambos nombres: Les Pingoüins y Les Cosaques, serán otros dos motes que rotulan una pareja half track de la compañía. En los arrabales de París, Dronne, Hugo, Bernal, David y Pietro y el resto de los héroes de La Nueve esperan la orden de Leclerc de avanzar sobre París. Solos… Y se produce el milagro: ¡París liberado! París conquistada por el valor y la audacia. Al día siguiente entra el resto de la División, pero la leyenda ya ha sido forjada. Y escrito su relato.

Los hombres de La Nueve han dejado mucho por el camino y queda un largo trecho para regresar a casa. Todo lo revivirá Nicoletta, setenta años después. En el viejo París.